Por: Liliana Caicedo Moreno
Desarrollo Lemaitre
Cuando hablamos de sostenibilidad empresarial, uno de los conceptos clave es la debida diligencia. Pero ¿qué significa exactamente este término y por qué es tan importante? En este blog, desglosaremos el proceso de debida diligencia en el contexto de la sostenibilidad, explorando cómo las empresas pueden identificar y gestionar los riesgos asociados a sus operaciones. Además, aclararemos las diferencias entre debida diligencia en términos legales y en derechos humanos, para que puedas entender cómo aplicar estos principios de manera efectiva en tu empresa.
En el mundo empresarial y legal, el término «debida diligencia» puede tener significados distintos, aunque ambos comparten el objetivo de prevenir riesgos y asegurar el cumplimiento normativo.
En el contexto legal, la debida diligencia se refiere a la responsabilidad de una empresa de realizar un cuidado razonable y exhaustivo para cumplir con las leyes y regulaciones aplicables. Esto implica investigar y evaluar a las contrapartes y operaciones de la empresa para minimizar riesgos legales y financieros. En la circular de la Superintendencia de Sociedades, este proceso incluye verificar identidades, monitorizar transacciones y mantener prácticas consistentes para asegurar que las empresas no solo cumplen con la normativa, sino que también evitan problemas legales futuros.
Por otro lado, en el ámbito de los derechos humanos, la debida diligencia se enfoca en identificar, prevenir y mitigar impactos negativos en los derechos humanos derivados de las actividades empresariales. Basado en los Principios Rectores de Naciones Unidas, este proceso incluye la evaluación de los efectos de las operaciones de la empresa sobre los derechos humanos, la integración de medidas correctivas y la comunicación sobre cómo se manejan estos impactos. A diferencia de la debida diligencia legal, que se centra más en el cumplimiento normativo, la debida diligencia en derechos humanos aborda las responsabilidades éticas y sociales de una empresa para proteger y promover los derechos fundamentales en sus cadenas de valor.
Proceso de Debida Diligencia en la Sostenibilidad Empresarial
El proceso de debida diligencia en la sostenibilidad empresarial es esencial para identificar, evaluar y mitigar riesgos asociados a las prácticas empresariales. La circular de la Superintendencia de Sociedades desglosa este proceso en varios componentes clave.
- Primero, la evaluación y alcance de actividades requiere que las empresas revisen sus operaciones para identificar posibles impactos en las áreas de sostenibilidad. Por ejemplo, una empresa manufacturera debe evaluar sus emisiones de carbono y su gestión de residuos.
- Segundo, un sistema de gestión de riesgos permite a las empresas supervisar y evaluar continuamente los impactos de sus actividades. Herramientas como auditorías internas y software de gestión ambiental ayudan a rastrear y mitigar riesgos de manera efectiva.
- Tercero, el seguimiento a la eficacia de medidas implementadas es crucial para asegurar que las acciones correctivas sean efectivas. Las empresas deben monitorear regularmente los resultados de sus estrategias de sostenibilidad y ajustar sus prácticas según sea necesario.
Las mejores prácticas incluyen la utilización de estándares internacionales como ISO 14001 para la gestión ambiental y la colaboración con consultoras especializadas en sostenibilidad para obtener asesoramiento y apoyo en la implementación de medidas.
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